al derecho y al revés

Ayer conversando con el tanti se me escapó una frase que abrió un cajón de recuerdos empolvados hace ya mucho tiempo.
Con olor a navidad, crema de manos y lleno de colores bonitos… hace muchos años, cuando las cataratas aun no ponían sus ojos de ese color celeste y verde que tanto me gusta, mi abuelita me tejía el último grito de la moda para barbies, quizás ahí no le haya tomado el peso, pero hoy, que ganas tengo de haber conservado aunque sea uno de esos lindos vestidos.
Mi au siempre siempre, agarraba mis manos y me decía que debería haber tomado clases de piano o guitarra porque tenía los dedos largos, en los veranos me daba pedazos de duraznos cuando yo casi me quedaba dormida, y nunca paro de rascar mi espalda sin que yo se lo pidiera antes.
Era una maestra saltando la cuerda, y cocinando wafles y pastel de choclo, por ella me gusta tejer y es por ella que de todas las cosas que no se, en una tengo certeza…Amanda